Amor al prójimo, Max Jacob
A Rousselot.
¿Quién vio al sapo cruzar una calle? Es todo un hombrecito: una muñeca no es más minúscula. Se arrastra sobre las rodillas: ¿tiene vergüenza, tal vez…? ¡No: es romántico! Una pierna se le retrasa, ¡y la vuelve a traer! ¿Adónde va, así? Sale del albañal, pobre clown. Nadie vio a este sapo en la calle. Antes nadie me veía en la calle, pero hoy los niños se burlan de mi estrella amarilla. ¡Sapo feliz! Tu no tienes estrella amarilla.