Cuando, dormida tú, me echo en tu alma… Cuando, dormida tú, me echo en tu alma y escucho, con mi oído en tu pecho desnudo, tu corazón tranquilo, me parece que, en su latir hondo, sorprendo el secreto del centro del mundo. Me parece que legiones de ángeles, en caballos celestes -como cuando, en la …
Categoría: Juan Ramón Jiménez
Aquella tarde, al decirle… JUAN RAMÓN JIMÉNEZ
Aquella tarde, al decirle… Aquella tarde, al decirle que me alejaba del pueblo, me miró triste, muy triste, vagamente sonriendo. Me dijo: ¿Por qué te vas? Le dije: Porque el silencio de estos valles me amortaja como si estuviera muerto. -¿Por qué te vas?- He sentido que quiere gritar mi pecho, y en estos valles …