Mañana puedo morir y aún no he amado. Jamás mis labios rozaron unos labios de mujer, Ninguna me entregó en su mirada el alma, Ninguna me estrechó contra su extasiado corazón. Ha sido mi vida un continuo penar, por toda la naturaleza, Por los seres, por el viento, las flores, el firmamento , Sufrir por …