Miguel de Unamuno

La oración del ateo – MIGUEL DE UNAMUNO

Oye mi ruego Tú, Dios que no existes, y en tu nada recoge estas mis quejas; Tú que a los pobres hombres nunca dejas sin consuelo de engaño. No resistes a nuestro ruego y nuestro anhelo vistes, cuando Tú de mi mente más te alejas; mas recuerdo las plácidas consejas con que mi alma endulzóme …

Leer completo