La vida, no intentes… La vida, no intentes alcanzarla que, desde hoy, para ti será como un hada. Los días, acéptalos como el niño que, mientras camina, recibe del viento su lluvia de flores. En ningún instante se le ocurrirá recoger y guardar esta lluvia. Dulcemente desprenderá de sus cabellos las que allí quedaron como …